Para obtener una visión más amplia del impacto de Linux en el así llamado ``mundo real'' (vale decir, fuera de las murallas cubiertas de hiedra de la UTFSM), consulté en varios foros sobre el tema. La muestra de unas 40 respuestas que así obtuve definitivamente no cubre el espectro completo, pero espero que sirva para dar una visión de lo que ha significado Linux, ya no como objeto de hobby sino como plataforma de aplicaciones serias.
De las respuestas (y también de observación personal) se ve que el uso más frecuente es como plataforma para servicios de red, particularmente correo electrónico y web. Se mencionan también usos como router y proxy, y como servidor de nombres, y como estación de monitoreo de redes. El consenso parece ser excelentes experiencias con la estabilidad del sistema. Respuestas en este sentido me llegaron de diversas fuentes, de instituciones educacionales tanto de proveedores de servicios de Internet como Imaginativa y Webhost como de motores de búsqueda como La Brújula, e incluso el Ministerio de Planificación ( MIDEPLAN) usan Linux para estos fines. En muchos casos la misma máquina que corre el servidor WWW también maneja las bases de datos que alimentan las páginas, usando alguno de los administradores de bases de datos que se distribuyen gratuitamente.
Otras empresas que basan su negocio en Linux incluyen a Tecnoera, quienes desarrollaron entre otros NETexplora. Mencionan que instalan una máquina como router, cortafuegos, y servidor de archivos. Asimismo, la Oranización Educacional Diego Portales (con sede en Concepción, con 5 centros de formación técnica a lo largo de Chile) usa Linux para su acceso a la red y conexión entre sitios. Han desarrollado algunas asesorías instalando Linux, entre los sitios caben mencionar Centro de Educación de Alta Tecnología (un liceo politécnico), Visualmarket (empresa de publicidad y marketing), YMCA (sede Concepción).
Se menciona también que las distribuciones ``traen todo,'' no hace falta buscar e instalar software extra. Este último punto es interesante, dado que el trabajo (y por tanto el costo, que puede ser no despreciable) de ubicar, configurar e instalar los paquetes necesarios ya está hecho. Además, se puede confiar en que el proveedor de la distribución siga la evolución de los paquetes que ofrece, y ponga a disposición de los usuarios versiones actualizadas cuando se hacen necesarias por razones de mal funcionamiento o problemas de seguridad.
Otra aplicación común es como plataforma de desarrollo (es mucho más barato tener un PC con Linux que una estación de trabajo, o incluso un PC con un Unix propietario). Personalmente he usado Linux en esta capacidad en algunos proyectos de asesoría, en parte porque es lo que tengo a mano (la estación Sun Ultra 1 en que escribo ésto corre exclusivamente Linux, mi notebook corre tanto Linux como Windows98, y en casa mi máquina personal es un PC corriendo Linux también.) y en buena parte porque este ambiente me tiene malcriado, en comparación encuentro casi hostiles los ambientes Unix comerciales.
Algunos tienen bases de datos, incluso substanciales, corriendo bajo Linux. Se han mencionado bases de datos con millones de registros usando por ejemplo MySQL que funcionan sin nigún problema tras páginas WWW, otros usan bases de datos comerciales como Oracle, Sybase, o DB/2 que también existen en versiones para Linux. Lentamente Linux se está ubicando en posiciones de plataforma para servicios incluso críticos, y se están efectuando desarrollos específicamente para Linux, como es el caso del producto SIGA (Sistema Integrado de Gestión Administrativa) de Teamwise S.A..
Una de las cosas que me llama la atención es lo rápido que ha sido el proceso desde experimentos iniciales (normalmente corriendo en alguna máquina de deshecho) a hacerse cargo de servicios importantes, e incluso críticos. En algunos casos que conozco de cerca, esto fue una evolución que tomó no más alla de un año desde el momento que alguien llegó con CDs de Linux bajo el brazo (a veces incluso sin conocer de Linux, y muy poco de Unix).
El comentario general es que Linux disminuye a casi nada el esfuerzo de soporte de las aplicaciones. Otro punto importante es el bajo costo del sistema, y el hecho que incluye tal cantidad de servicios y herramientas. Sin embargo, el hecho de su distribución gratuita aún produce alguna reticencia.
Recientemente he recibido comentarios de buenas experiencias montando ambientes de oficina completos (no sólo servidores) sobre Linux, usando el paquete StarOffice. Las razones de migrar de otros ambientes son el alto costo que significan en términos de licencias, y la muy superior estabilidad de Linux. Sin embargo, se menciona que la capacitación a nivel de usuarios aún es incipiente, y que falta personal especializado que apoye la instalación, configuración ycapacitación.
Los problemas que se presentan con mayor frecuencia son debidos a problemas de compatibilidad del sistema con hardware. Son contados los proveedores de hardware que mantienen drivers para sus ofertas, los drivers en su inmensa mayoría son escritos y mantenidos por entusiastas. Para bastante hardware simplemente no hay soporte, o éste es pobre. Acá la única salida real es conseguir primeramente la lista de hardware soportado por la distribución elegida, y en base a ésta elegir los componentes. Ya hay varias empresas venden equipos con Linux preinstalado, y esto ahora también incluye proveedores de marcas mundiales como Compaq e IBM. En todo caso, la variedad de hardware soportado de buena forma por Linux suele ser mucho más amplia que la que soportan versiones comerciales de Unix que corren en PC, en parte debido a su mayor popularidad y también a que cualquier entusiasta que tenga un dispositivo extraño está en condiciones de crear el soporte necesario (siempre que cuente con la información técnica detallada del caso), y aportarlo a la versión oficial.
Otra de las críticas es que hay pocas empresas que ofrezcan herramientas de desarrollo para Linux. En rigor, hay una gran oferta de herramientas de desarrollo, para variados lenguajes tradicionales, pero en el área específica de desarrollo de ambientes gráficos la oferta es aún incipiente.
Tampoco hay gran oferta de herramientas orientadas al usuario final (paquetes de oficina y similares), o las ofertas no son totalmente compatibles con la base instalada. También acá se está trabajando arduamente, aunque los productos en general aún están en fase de prueba. Por otro lado, hay aplicaciones comerciales como Netscape (el conocido browser de WWW; sus fuentes fueron liberados recientemente por Netscape) y Star Office (un completo paquete de oficina; el 2 de noviembre de 2000 Sun Microsystems liberó el fuente bajo GPL) que se distribuyen gratuitamente, y una gama de productos pagados.
Se ha criticado también la falta de ambientes gráficos para Linux pero este problema está hoy por hoy resuelto en buena forma a través de KDE y Gnome. Ambas alternativas (y posiblemente aún otras) están incluidas en las distribuciones modernas. También se distribuyen versiones comerciales del ambiente CDE y Motif que se ha hecho standard en Unix comerciales.
Varios me mencionan que es política de la empresa no usar sistemas que no tengan posibilidad de contratos de servicio en aplicaciones clave. En este sentido, la aún incipiente industria de soporte de Linux tiene buenas posibilidades de transformarse en un factor clave para la penetración en algunas áreas. Están apareciendo nuevas ofertas en el área incluso acá en Chile.
Sé de bastantes estudiantes que ofrecen servicio de instalación y soporte de Linux, en general con buenos resultados; aunque me llegaron comentarios de profesionales que indican que una parte de su negocio como consultores ha resultado de estudiantes que instalaron el sistema y luego no estuvieron en condiciones de ofrecer soporte adecuado.
Sobre la cantidad y calidad de la documentación disponible hay opiniones divididas. Unos encuentran que el rango y profundidad de la documentación es excelente, mientras otros la encuentran insuficiente, a veces confusa y con errores que cuestan tiempo. Como conozco de cerca a las personas que hicieron estos comentarios, y por mi propia observación, me queda la impresión que la documentación está más orientada a la persona que ya entiende mucho de computación y del sistema, mientras alguien menos experto puede perderse en ella. Hay grandes esfuerzos por llenar esta brecha en marcha, como el Linux Documentation Project (LDP) y variados esfuerzos para traducir la documentación existente al español, como el proyecto LuCAS y a otras lenguas. Pero claramente queda camino por recorrer acá.
Uno comentó que los profesionales que ofrecen soporte en el área Linux en muchos casos están centrados en la máquina, y pierden de vista el ámbito más global del negocio. Atribuye ésto a un poco de falta de madurez del área. Probablemente tenga razón en ésto, aún no son demasiados los profesionales con larga experiencia que ofrecen soporte, aunque ya no son únicamente los entusiastas que partieron con Linux los que se interesan en este negocio.
Está el mito que Unix es difícil de manejar, y que se necesita personal especialista en su administración. Siendo Linux en lo principal un clon de Unix, cabría esperar que los problemas de administrar el sistema fueran comentarios recurrentes. Sin embargo, las menciones sobre el tema van justamente en dirección contraria: Linux resulta más fácil de administrar que los sistemas a los que reemplazó, en parte por gran estabilidad (``El sistema WWW sobre WindowsNT que teníamos se caía una o dos veces al día, y el equipo completo una o dos veces por semana, lo que significaba problemas al no contar con más de un especialista en esa plataforma. Ahora tenemos el sistema en Linux corriendo hace unos dos an os, y nunca se ha caído.'') y en parte por su flexibilidad (``Ha facilitado la administración integral del ambiente informático, gran estabilidad y todas las alternativas de proyección en bases de datos y web.''). Otra característica que se destaca es la enorme flexibilidad, el que permite interconectar fácilmente aplicaciones diversas y diversas plataformas.